miércoles, 19 de noviembre de 2014



Que lindo que era verlos caminando, un alma sola dividida en dos, la orilla de ese mar los encantaba y quedaba todo quieto alrededor.  Hermosa fue la vida que llevaron, la suerte no les quiso dar un sol,  curioso es que su risa iluminaba hasta el día que ese mal se lo llevo.  Ella Se queda con su foto en un rincón  y sueña encontrarlo arriba. Ella sigue con su vida recortada sin él fue una vida sin color,  la imagen de sus ratos más felices, hasta ahora siguen siendo su motor.